VAMOOOOOOS!
ME RECIBÍ CARAJO!
Eso era lo que yo quería gritar al recibir mi ocho de matemática y de darme cuenta de que finalmente era libre!
Le dije adiós a la secundaria, y sé muy bien que la voy a extrañar, que no va a haber nada igual a las mañanas con gritos, llantos, y chismes. Todo eso será reemplazado por nuevas experiencias en el CBC y la Facultad.
A pesar de que nadie brindó por mí cuando recibí el diploma, yo me sentí feliz igual. Sentí que había logrado algo yo sola, sin ayuda de nadie, con el apoyo de varios, pero sola. Otros 5 años "exitosos" de mi vida, que seguro únicamente yo recordaré. Me hubiese gustado brindar y festejar como lo hicieron mis compañeras... pero bueh, es lo que hay.
Ayer, al enterarme que aprobé matemática: abracé a la profesora, grité e hice pequeños saltitos de felicidad; salí del aula, corrí y me abracé a mi hermoso novio♥ que me esperaba a la salida. Estaba F-E-L-I-Z. Luego vino la "alegría" de mis padres y como todo final, una discusión. Nunca puede haber un día feliz de-corrido si ellos están en escena.
Hoy me di el lujo de festejar el fin del ciclo en compañía de mi amado. Lo fui a buscar y nos tomamos un heladito en el balcón de mi casa. Nos fuimos a pasear después y quería que se quedara a cenar, pero debía irse :( Aun así fue una bellísima tarde. Como todas las que paso a su lado.
Y bueno, como no podía faltar, el broche de oro fue una mini-discusión con mi madre sobre el GYM al que debo ir (por orden médica) y que no me firman autorizándome.
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Resumen del fin de semana (pasado):
Expectacular! Asistí a una celebración por el casamiento de un familiar de mi novio. En una quinta. Nunca antes había ido a una, así que fue algo nuevo. La pasé genial, me quedé a domir y por fin descansé como la gente! Pero a la tarde del domingo todo se amargó con los sermones de mi madre. Como no iba a dejar que me arruinara mas el día, mientras me "retaba" yo pensaba en lo bien que la habia pasado y no le escuché ni una palabra de lo que me dijo. En definitiva, no le di bola. Por ende, para mí, tuvo un final feliz.